Es claro que la denominada
“clase media” – la que para mí no es en sí misma una clase, sino parte de la
clase trabajadora en donde la aglutinaba Antonio Gramsci y, con lo cual
concuerdo plenamente – no es un todo homogéneo.
Dentro de cierto imaginario
Jauretchiano y Discepoliano – al cual generalmente adherimos - se ha
identificado a esa clase con un sentido más homogéneo como el tilingo o el
gorila que pretende, hablando mal y pronto, “cagar más alto que lo que el culo
le da”.
A ella nos referimos comúnmente
y le apuntamos, por ejemplo en esta etapa como ese personaje “desagradecido” en
algunos casos – serían aquellos que no vivieron los terribles momentos de la
década del noventa y principios del dos mil o eran muy pequeños – ó “desagradecido”,
“desmemoriado” y tremendamente “individualista” en otros casos.
Esos que son capaces de
denostar al que no tiene; o al humilde; o a aquel trabajador no calificado; a
la empleada doméstica – a pesar que muchos la tienen -, etc.
Esos que esperan un
rotundo ascenso social que los ubique en el pináculo del “cerro capitalista” y
son capaces de arrancarle los ojos al que tienen al lado para lograrlo a pesar
de ser de su “misma clase”.
A ellos los apuntamos, no
sin cierta razón, como los contribuyentes sustanciales de una reciente derrota
electoral.
Ahora bien, "nuestra" clase
media, "La Progre", no goza de cierto vestigio de pacatismo? No tiene cierto resabio de
tilinguería?
A mi entender creo que sí.
Dos ejemplos uno bastante profundo y otro más anecdótico pero que va en el
mismo sentido
Primer Ejemplo:
Varios sectores de nuestro
movimiento, pero en especial La Cámpora y Nuevo Encuentro, durante todo el
proceso de los doce años del proyecto nacional y popular que se intentó
instalar en nuestro país a partir de 2003, fueron refractarios al movimiento obrero
– nadie dice que los “muchachos” sean fáciles – que más allá de su o de algunos
de sus dirigentes siempre fue la columna vertebral del movimiento nacional y,
en épocas aciagas, vanguardia de la resistencia.
Néstor supo lidiar con
esas contradicciones y mantener unidas las piezas fundamentales de ese movimiento
nacional su muerte, que en cierta medida contribuyó a un triunfo rotundo en las
urnas en 2011, término siendo, también – valga la desgraciada alegoría – el certificado
de defunción del proceso iniciado en 2003.
El Compañero era el cable
a tierra, era el pícaro, el barrio, necesario, sustancial e indispensable para
la gran luminaria de La Jefa, su falta implicó que la misma se recostara en La
Cámpora – quiero aclarar que con ello no estoy estigmatizando, si criticando, a
este sector del peronismo – y ambas partes se retroalimentaran, lo que fue
dejando de lado a otros sectores del movimiento.
El primero en “caer en la
volteada” fue el movimiento obrero.
Que algunos méritos hizo
para ello, estamos de acuerdo, pero cortar todo tipo de diálogo – porque tampoco
le dio demasiado aire a la CTA de Yasky que se mantuvo “firme junto al pueblo
como Crónica” – y tratar de jugar al desgaste permanente de ese sector sin distinguir
y/o hacer aliados. Porque tampoco a Caló le dispensaron un trato que pudiera
hacer ver que subsistía una alianza potable con el movimiento obrero.
Esa cuestión refractaria
hacia el sindicalismo, es muy propia de la tilinguería y el gorilaje de clase
media.
Y en este caso esa
tilinguería es propia, es nuestra, que la ha cargado gran parte de nuestro
propio movimiento y, a mi entender y sé que algunos – quizá muchos- se enojarán
conmigo, nuestra propia Jefa a cargado con este estigma que sólo lo “exorcizaba”
Néstor Kirchner.
Segundo Ejemplo:
Ayer esperaba a mi pareja
en el bar Vittorio de Congreso, en el ínterin de la espera, se sientan en la
mesa de atrás cuatro mujeres que empezaron a comentar sobre la marcha del
martes – a la cual habían asistido por supuesto -, de las luchas populares, la
lucha de clases y la clase media.
La crítica a la clase
media – a la cual ellas también pertenecían – provenía fundamentalmente – en este
caso – de su participación en la Marcha que se originó por el despido de Víctor
Hugo Morales de radio Continental.
Una de las frases que me
quedó retumbando en el oído fue: “La
clase media es una creación del capitalismo para frenar la lucha de clases”.
Quizá esa frase tenga algo
de cierto, pero me parece que es un “poquititito” más profundo aún, pero la
idea no es analizar la frase en sí misma, sino el fenómeno de la marcha que
tuvo una cierta masividad, pero que no deja de tener cierto toque de
tilinguería – en este caso, no de gorilaje, pero sí de tilinguería -.
Sin ofender, sé que muchos
compañeros han ido de muy buena fe, convencidos de que es un ataque a la
libertad de expresión, que junto al embate contra la ley de medios, es el combate
contra símbolos más que importantes de la etapa 2003/2015.
Sólo pido que nos detengamos
a pensar un poco y, con esto tampoco quiero ser extremista.
a) La convocatoria fue
bastante espontánea, no? – sin que para mí la espontaneidad sea un valor en sí
mismo -.
b) La respuesta fue muy
rápida, no cierto?
c) Para ser una convocatoria
hecha con casi nada de tiempo la respuesta fue, bastante, masiva, no es así?
d) Pero, quienes asistieron a
esa convocatoria?
e) Vimos sectores populares
aparte de los sectores medios?
f) Y por qué sucedió eso?
Pareciera que aún a pesar
de estar ideológicamente de un mismo lado no tenemos los mismos intereses que
la otra parte de los sectores populares y nos movilizan otras cosas.
Inconscientemente, es
parte de los resabios de la cultura tilinga que nos taladra.
Estuvo mal ir a la marcha
que se originó por el despido de Víctor Hugo Morales? NO, POR SUPUESTO QUE NO!
Pero al día de hoy tenemos
chequeados 23.280 compañeros estatales despedidos – algunas fuentes dicen que llegan
a sesenta y cinco mil – y 8.363 compañeros despedidos del sector privado.
Hemos generado alguna
convocatoria por ellos? Si se hubiese generado, cuántos de los que estuvieron
en la plaza - con una mano en el corazón
– hubiesen ido? Cuantos de los dirigentes que allí estuvieron hubiesen ido?.
Que ello es responsabilidad
de los dirigentes sindicales? Si!
Pero porque se generó una
convocatoria espontánea por Víctor Hugo? Nos afecta mucho más un solo trabajador
conocido que treinta y un mil desconocidos?
Nos afecta mucho más la
censura que el avance del plan de disciplinamiento social producto del
desempleo que está ejecutando el Gobierno?.
Nos olvidamos de “Con los
dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes”?
No solo la “otra” clase
media es pacata.
“Nuestra” clase media
también tiene su nivel de pacatería que es, también, bastante dañino!
BLACK CANARY
Se hace lo que se puede. Avanzan demasiado rápidamente.
ResponderEliminarSe hace lo que se puede. Avanzan demasiado rápidamente.
ResponderEliminar✌ Will Benice✌
ResponderEliminarAdhiero. Y agrego como lo he dicho tantas veces en donde sea, que buena parte de nuestro tejido social se ha subordinado a 678, siendo que 678 es el primer responsable de que hoy no estemos gobernando.
Se pasaron AÑOS denostando a Scioli contra la prueba irrebatible de la realidad, y tejiendo esa mentalidad de "cara de oliendo mierda" que puso a nuestra Clase Mierda en el rol de pretenderse "juez" de si "este candidato o aquel", sin medir las consecuencias que hoy sufrimos.
Esto viene de mucho más lejos, de un día en que Hernan Cortez huía de los Aztecas por la selva con una tropa de solo 26 forajidos enfermos y hambrientos. Quiso suerte que 4.000 soldados del emperador vecino los interceptasen. Los rodearon y el general del emperador les dijo "Ríndanse!"... a lo que Cortez respondió "Nos rendimos si ustedes entregan sus armas y a su emperador"....
Y los Cholulos del reino de Cholula entregaron sus armas y a su Emperador. ¿Porqué lo hicieron? Porque estaban maravillados por los brillos de las armaduras de los forajidos de Cortez.
That is the question, de aquel lado, y de este también.